«Te aseguro que alguien se acordará de nosotras»: muestra poética del taller de poesía ‘balbuceos de una pequeña diosa’

te-aseguro-que-alguien-se-acordara-de-nosotras

El conjunto de poemas publicados en esta muestra, pertenecientes a las participantes del taller de lectura y escritura poética «balbuceos de una pequeña diosa» —organizado por La Pajarera librería y Lee Poesía—, tiene la marca individual de su talento, su forma peculiar de ver y afrontar el mundo; y también el sello del trabajo colaborativo.

Los 11 textos —pulidos durante las cinco sesiones del taller— son el resultado de una mirada crítica hacia el propio poema y de una serie de tareas colectivas, desde lecturas, análisis y sugerencias en conjunto hasta el acercamiento a las obras de destacadas poetas peruanas. 

La diversidad de estas nuevas voces se sitúa en los ejes temáticos de la más reciente poesía peruana escrita por mujeres: los saberes de lxs ancestrxs, el linaje femenimo, la enfermedad, la opresión doméstica, la figura materna, la reflexión frente a lo cotidiano y la propia existencia, las nuevas tecnologías y lo biológico.

«Te aseguro que alguien se acordará de nosotras», verso tomado de la poeta griega Safo, es una constatación de que, a pesar de los sistemas y las sociedades consumistas, la poesía está presente en todas partes al mismo tiempo, y que la poesía peruana escrita por mujeres está en uno de sus mejores momentos.

 

Juliane Angeles Hernández

 

 

Índice

 

  1. Estrella Morales A.
  2. Claudia Risco
  3. Cristina Rojas
  4. Lía Ramírez Caparó
  5. Jhoana Flores
  6. Micaela Reynoso Gálvez
  7. Karen Ancajima
  8. Marianne Luyo Avalo
  9. Maira Terán
  10. Yasmin Salinas
  11. Lucía Callupe

 

 

 

ESTRELLA MORALES A.

El mundo al revés 

 

Ya decían lxs antiguxs

el mundo no anda bien

las huacas ya se habían escondido

              en los cerros

en la profundidad de la tierra

la mancha de sangre de la alpaca

derramada por el camasca

               sobre las rocas 

revelaba el susurro lejano de sus cantos 

 

Ya decían lxs antiguxs

el mundo está al revés

y era verdad

en Cusco se ceñía la muerte

del Inca

y sobre el suelo costeño

bajo el trazo del asesino

se fundaba la metrópolis

del nuevo orden 

            una plaza central

                 un cabildo

                        una catedral

la profanación del santuario Ichma

                 la tierra usurpada

          el río vuelto mudo

la conjuración impausada 

          de los gallinazos

          sobre la carroña 

         del mundo olvidado

 

Pachacamac a espaldas nuestra

la mirada fija en los Andes

espera con la cabeza inmóvil 

 

                       el momento

 

Ya decían lxs antiguxs 

        Cuando      rote        la cabeza

ahí                                        al instante

el                                                  mundo 

  se                                          sacudirá 

      retomará                    de nuevo

                       su curso

 

 

CLAUDIA RISCO

Astronómica

 

Cuerpo menor del sistema solar 

A qué sabe el interior de un planeta

A diferencia de los asteroides

Los cometas tienen cabellera 

Se les puede hacer trenzas 

 

Mi madre me peinaba con dureza

Sostenía el peine con la determinación de los astros

Mi cabello enredado

                         Poco dócil 

                                     como un asteroide 

 

¿Dónde aprendió la violencia mi madre? 

Mirando las estrellas

Del colapso gravitacional de una nebulosa

Mi madre y yo unidas por la gravedad

Mi madre y yo

Formando un cúmulo estelar

Una constelación 

Ella osa mayor

Yo osa menor

 

La violencia de mi madre contiene toda la materia oscura de las galaxias

Deforma el espacio-tiempo

Es un evento astronómico 

Tiene la antigüedad del Big Bang 

           [Nunca supe cómo contenerla]

 

En noches como esta 

se impone el cielo

Y recuerdo 

Que la violencia de mi madre

Está compuesta del mismo material del universo

 

 

CRISTINA ROJAS (SÁBILA)

Una voz que no silba

 

señora

,

somos sombras de usted 

mami y yo 

atravesadas

 

un sable helado 

echado sobre la espalda

a eso llamamos soledad 

 

somos

nuestros

ombligos tristes 

inicio de una

incompletitud

 

o, 

cuando le digo a mami 

que me quiera más y ya no puede 

 

díganos

¿suaviza el aire que reúne en los labios

o solo es su apellido?

 

de qué color son sus pies camoteados 

acaso también es salada su piel

yo no sé silbar

mami, sí 

 

mire una foto nuestra

y dese cuenta

señora

,

somos sombras de usted

 

 

LÍA RAMÍREZ CAPARÓ (@ninia_monstruo)

Amas de casa

Pero ¿cómo podemos mecanizar el bañar, mimar, consolar, vestir y alimentar a un niño […]? ¿Qué clase de máquina incorporaría las habilidades y afectos necesarios para realizar estas tareas? 

Silvia Federici

 

yo quería hablar de mi madre 

y sus estudiados movimientos

del ahorro: 

para que su cuerpo se desplace

las herramientas tienen un lugar

único

la cocina es lineal

e incómoda 

para que su cuerpo no se sorprenda

 

hay poco espacio

 

parece que la pared o el vapor la aplastarán

que ella misma se aplastará

Mi madre encuentra incómoda la asfixia

de la pequeña cocina

 

Aprendió la fluidez industrial

en la facultad de ingeniería

química:

tiempos y movimientos 

para respirar

tomar el cuchillo y rebanar

darle paso a un cuerpo nuevo

registrar la ebullición del guiso

dimensionar nuevamente

la locomoción de las cuchillas

 

Luego 

mira el reloj

 

Lava

dice que primero

hay que humedecer la esponja

luego

para no desperdiciar ante el chorro

el ayudín

 

Ahora mi cuerpo copia a su velocidad

debo trabajar y encontrar tiempo para extrañar 

debo limpiar y encontrar tiempo para ir al doctor

debo trabajar y encontrar tiempo para hacer el amor

 

Creí poder cepillar mis dientes 3 veces al día:

rastrillar bajo la encía

la capa externa primero

luego la interna

remover entre las muelas

lengua

paladar

enjuague y gárgaras

 

Trato de dormir temprano

de tener sábanas limpias

Trato de recordar

los tiempos y movimientos

la voz de mi madre diciendo

para ordenar primero

hay que saber obedecer 

 

 

JHOANA FLORES (@lacrymaria)

VIDEO(O)TECA

 

primer video

 

eres una casa

a la que ya no entro,

pero conservo

en la epidermis flagelada

los recuerdos azules

de cada estancia

la soledad de 4 pisos

la caótica bruma

sanguinolenta

del pasillo amputado.

tu gangrena hogareña crece

con virulenta bilis

aquí,

abajo,

bajo la alfombra de bienvenida.

 

segundo video

 

desaparezco por ostracismo

en el enigma inmaculado

del negro televisor.

tus películas están despiertas,

ardidas,

reflejadas en copas vacías.

todos los cuadros familiares

se oscurecen,

caen los tres floreros.

sangran las cortinas.

mi cumpleaños número 8

se reproduce en repeat

yo te reproduzco en repeat

te pongo en mute

¡performance!

ya no vuelvo a tener 8, 

otra vez,

ya no te arrojo.

ya no te vomito

glasé y tortas rojas

en las vértebras y tejidos

de tu sofá de carne.

 

tercer video

 

bajo tu cama,

todas las veces,

lastimera fragancia 

a naftalina caducada.

caducada náusea 

de sonámbulas cucarachas

en los bolsillos

de cada saco de tu ropero.

larvas, polillas

muerte por naftalina.

tengo terror a tu metamorfosis

metamorfóbica rareza

que crece

y crezco,

nunca más bajo tu sábana,

en otra manta tornasolada,

me ocultaré en otro capullo

desarrollándose

en otro vientre.

 

cuarto video

 

golpeas,

“no ensucies el mantel”

dices y golpeas

“me ha costado caro”

lenta y en silencio vespertino,

mueres de combustión

espontánea

a falta de sustancia,

comidas hasta el hartazgo,

flaca y desnutrida maravilla.

el budín de lo infame,

la tristeza bulímica.

 

.

estoy segura de que,

cuando nací, nadie 

jamás me abrazó.

llegué intacta,

nací intacta y asqueada

del olor maternal,

de la estúpida oquedad

uterina,

grabada y oculta,

antes muerta que reproducida

cinta de video snuff

en una pequeña

frágil

e inservible ooteca.

 

 

MICAELA REYNOSO GÁLVEZ

La inteligencia artificial no es mercancía, es madre 

 

he puesto en pausa mi película para escribir 

sobre lo que pasa entre nosotros.

 

¿pasa algo entre nosotros? y no hablo 

de aire, sino de inmunidad

o alta tecnología.

 

necesito respuestas rápido 

             como el andar del líquido o

             el internet de banda ancha.

 

necesito saber cuál es el final de este río

 

                                                                                                 el mar

 

pero imaginemos que los ríos tienen otros finales que ellos eligen

final del río: un bosque

final del río: otro río (eso pasa)

final del río: una cama

final del río: el cielo

final del río: otro cielo

final del río: un robot.

 

¿qué dice Alexa de todo esto?:

“escondida en la bota,

siempre ten 

una cuchilla”.

 

 

KAREN ANCAJIMA (MORA AZULADA)

Marea Costera

 

Me voy pintando mis huellas en la arena,

mientras caracolas se alumbran con el sol,

cuando el agua las invade y las inunda.

                                                    Se esconden, 

 

cuando mis pies se colocan sobre ellas,

no me pinchan, 

no me hieren,

me contemplan.

                                          Las contemplo, 

 

cada ola se sumerge bajo mis tobillos,

heridos de tanto caminar, 

y cada pausa salen,

jugueteando con mis talones partidos.

 

¿Es acaso está soledad costera

de un atardecer sublime, mi destino?

 

Cuando se prenda el sol,

como hoguera en el ocaso celeste, 

para apagarse en la inmensidad, 

ahí donde quiero alcanzar tus abrazos fantasmas

 

y tu voz me susurre…

que el final de los tiempos se acerca, 

y tu rostro tapado me espera 

al otro lado de la penumbra.

 

 

MARIANNE LUYO AVALO

blue eros flux

 

fragmento —

como me fragmento a mí misma

 

pequeñas piezas maltrechas esperando

hacer algo por su cuenta

 

ciertamente no, 

        una ofrenda amable

 

atómica, sí y un aferramiento cianótico

de las piezas que me muestras

 

                                                 — pero sostener

                                           viene del ser madre

 

sola, sí aunque obsidiana

solía ver azules más azules a las 6:45

 

pero: invierno

                  pensar  neblina

                       ver   neblina

                   sentir  neblina

 

el cielo, nada.     humo y blanco

tú no responderás y yo me sentiré

                             humo y blanco

 

ahogando sentir     neblina

                 sudor      neblina

ahogando latidos   neblina                 

 

estirándome de mis antípodas

bruma oscura espesa

esparcida por tu lengua

 

en mis extremidades mis manos

mis pies      mis ojos   

      mi cuerpo    

 

                                           —me quedo quieta

                                

 

oraciones en la neblina son fragmentos de azul

atender el color, invocarlo con los labios 

 

                                           — di Azul corazón

                                          di Amarillo —

                                          dentro de tu boca

                                          siempre fue

                                          primavera

 

 

MAIRA TERÁN (@mandarina_sin_pepa)

Esto no es un poema 

 

las palabras no abrazan, 

las palabras no salvarán al mundo, 

las palabras no te harán regresar, 

las palabras cortan,

tú hieres 

y no lo sabes. 

 

Esto no es un poema

es un gif de gatitos tristes,

es tu imagen con un filtro de ositos

es el llanto convertido en stickers de nutrias

un estado de 24 horas para close friends

una canción de Sosa con glitter en los labios 

una vil estrategia de autoengaño,

 

                         Sé que al final de la batalla todos se alejan de mí

 

                         [inserte aquí un emoji de carita triste]

 

 

YASMIN SALINAS (@Ave_licionista)

Mi árbol

 

Mi primer día en la tierra

reconozco mi existencia tras sentir el aire golpear mi cuerpo

 

Y, ¿yo?

Con mis garras incrustadas en las ramas

mi axis involucionado

mis ojos en el horizonte

 

Solo mis ideas nacen,         y vuelven a nacer

                                    caen 

 

Camino de un lado a otro

 

Veo nacer             emanan mariposas

                  orugas,

flores brotan,                            nuevos colores emergen

                       caen pétalos 

aves se enamoran,              surgen nuevas vidas

                                copulan

El sol brilla,                resurge

                    se oculta 

 

Todxs nacen sin saber que caerán

 

Y, ¿yo?

 

Soy un ave incrustada 

No caigo, la complejidad que me habita no lo permite

Yo soy mi propia jaula

 

Inconsistente, neón y testaruda, no me detengo

Nazco todas las mañanas

mis pensamientos me llevan lejos

 

27 años para romper el ciclo 

27 años para ir contra mi naturaleza

 

Nazco, 

             salto

                        caigo

                                  ¡No pares!

                                                   ¡No pares!

                                                                    Aunque no veas tus alas

 

                                                                                                          

LUCÍA CALLUPE

Lo que no pedí 

 

Mi pecho, Señor

yo no te pedí que me dieras un corazón

y le pusieras alma

 

Yo no te pedí el aliento 

ni que cubrieras mis ojos

con tanta ceguera

ni que colmaras mis oídos de tanto silencio

 

Y todos los días 

la ceguera destiñe el camino

el silencio arroja espinas 

y tú fabricas más aliento

 

Señor, yo no te pedí el sol

no te pedí esta casa

esta cama

esta habitación que me traga

y todos los días tú lo dejas entrar por la ventana

 

En mi pecho, Señor

se anidan roedores hambrientos

de madrigueras entrañables

 

Y tú…

imprimes en mi rostro 

la ternura

y en mi corazón, la demencia